Boricua asesinada en discoteca de Orlando murió protegiendo a su hijo
Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK,- La madre puertorriqueña de 11 hijos, Brenda Márquez McCool, una de las víctimas fatales en la matanza de Orlando, y que residía en Brooklyn, murió protegiendo a su hijo con el que bailaba en el momento de ser asesinada por dos balas del desalmado terrorista Omar Mateen, el domingo en la madrugada.
Ella, al igual que muchos y muchas otras que estaban en la discoteca “Pulse”, logró subir imágenes de la fiesta “Noche Latina” en su página facebook de la que era usuaria, según relató una hermana.
Tenía 49 años de edad y bailaba con su hijo Isaías Henderson, cuando el terrorista comenzó la noche sangrienta.
Varios cuerpos cayeron alrededor de ella y el hijo, y fue cuando Mateen, los vio vivos y les disparó, la madre se interpuso entre el asesino y su hijo, dijo su hermana Ada Pressley.
“Ella murió de un solo disparo, demostró lo mucho que quería a sus hijos. Si no hubiera sido por ella, Isaías también estuviera muerto”, agrega Pressley.
En el video subido a la red por Brenda, se escucha una salsa a todo volumen y el gentío mientras bailaba, se reía y disfrutaban del ambiente nocturno.
El hijo dijo en su página facebook, que 24 horas después que su madre fue asesinada, calificando de “surrealista” la escena en la que su progenitora cayó bajo la bala.
“Te amo mamá”, agrega el joven gay de 21 años de edad en el mensaje de facebook.
Henderson, fue sacado de la discoteca cuando los SWAT entraron a la discoteca. Su madre no era lesbiana, pero era amante de la salsa y le gustaba bailar con el hijo, por lo que frecuentemente lo acompañaba a fiestas y espectáculos, como esa noche.
La hermana, señala que Brenda fue una sobreviviente dos veces de cáncer y que cada año venía a Nueva York a participar en el desfile puertorriqueño de la Quinta Avenida, pero en esta oportunidad decidió celebrar en la discoteca de Orlando.
«Ella era una mujer valiente», dijo Pressley. «Durante todo el día y la noche que esperaba que ella estaría en el hospital.»
No fue hasta la noche del lunes que la familia supo que la señora McCool no había sobrevivido. El terrorista le disparó dos veces, añadió la hermana.
Apenas dos horas antes de que Mateen comenzara a disparar, McCool estaba bailando una salsa con su hijo y un amigo.
Ella publicó el vídeo en su página de facebook poco después de la medianoche.
Su quinto hijo mayor, Farrell Marshall, creó una página GoFundMe para ayudar a la familia con los gastos del funeral.
«Una decisión cambió la vida de muchos. Todo lo que pido es las oraciones y con lo que pueda para ayudar a mí, hermanos y hermanas para ser capaces de recoger los pedazos de nuestra madre», escribió Marshall.
Sobre 300 personas habían donado más de $10.000 en tan sólo unas horas.
Su ex marido, Robert Vance Pressley, dijo que se reunió y se casó con McCool en 1985 en California, cuando estaba en la Fuerza Aérea.
Ella trabajó como civil para ese cuerpo militar, dijo. Tuvieron dos hijos durante sus relaciones de cuatro años.
«Le encantaba bailar», dijo el ex aviador. «Ella era desinteresada, siempre dando de sí misma. Todos los niños en el vecindario eran parte de su familia», dijo.
El actor Wilson Cruz la describió como «una sobreviviente de cáncer, una madre estelar. Una abogada orgullosa y feroz por su familia”.
