• 26 abril, 2024

Dominicano buscado por narco hace 7 años, evadió controles en aeropuertos de EEUU, RD y Ecuador

Arismendi NolascoMiguel Cruz Tejada

NUEVA YORK,-  Un juez y el fiscal de la Corte del Distrito de Haverhill en Lawrence (Massachusetts), quedaron más que sorprendidos y boquiabiertos al comprobar que el presunto narcotraficante dominicano Arismendi Nolasco de 39 años de edad y quien era buscado desde hacía 7 años, con una orden de arresto  por cargos de narcotráfico, logró evadir los controles en aeropuertos de Estados Unidos, la República Dominicana y Ecuador, saliendo y regresando de Massachusetts, sin ser detenido por la policía de fronteras y aduanas.

Nolasco, quien se presentó al Departamento de Vehículos y Motores para renovar su licencia de conducir, recibió la notificación de un oficial de esa agencia, de que tenía que acudir a la corte.

Durante una verificación en el tribunal, apareció la orden de arresto que data de hace siete años. Fue arrestado de inmediato e instruido de cargos el jueves en la noche de la semana pasada, siendo detenido sin fianza y puesto en manos de las autoridades de inmigración, que ahora averiguarán cómo entró y salió de Estados Unidos, teniendo una orden de arresto en su contra.

El fiscal John De Paulo, calificó de «muy extraña» la evasión de controles que hizo Nolasco y él y el juez, pidieron explicaciones al dominicano respecto a cómo lo logró.

Nolasco, les dijo para sorprenderlos aún más, que estuvo preso por cinco años en Ecuador, pero regresó por el aeropuerto internacional John F. Kennedy en Nueva York y de aquí, regresó a Lawrence.

-Cómo fue capaz de entrar y salir del país con una orden de arresto?, le preguntó el magistrado Stephen Abany al dominicano.

El fiscal de Paulo dijo que Nolasco fue arrestado en el 2007 en Haverhill y acusado de venderle drogas a un policía encubierto.

Fue puesto en libertad con fianza de $40.000 dólares, pero no se presentó a la corte en la fecha impuesta y huyó de las autoridades para evadir la justicia.

Nolasco, también les dijo al fiscal y al juez que además de estar en una cárcel en Ecuador, le dio una paliza a un hombre que chocó el vehículo de su hija.

El dominicano relató que voló desde Nueva York y que tiene un pasaporte americano, sin hablar una sola palabra en inglés.

El fiscal reaccionó atónito, exigiendo a inmigración que hagan investigaciones adicionales de fondo a un hombre que como Nolasco, estuvo cinco años preso en Ecuador por un crimen violento y logró reentrar a Estados Unidos, sin ser tocado.

«Ahora, él está a nuestra puerta», expresó el fiscal.

El abogado de oficio Lee Graham designado para representar al dominicano, dijo que su defendido nació en la República Dominicana, pero es ciudadano de los Estados Unidos y que antes de la detención en el 2007, había vivido 12 años en Puerto Rico y Estados Unidos.

El abogado, explicó que Nolasco le dijo que nunca se presentó a la corte, porque nadie se lo dijo en español.

Señaló el jurista que Nolasco, regresó hace dos semanas por el aeropuerto de Nueva York y está viviendo con una hermana en el poblado de Methuen.

El juez puso en duda el argumento del abogado, mientras el fiscal rebatió que Nolasco habló en inglés con la policía, la que lo especifica en el reporte del arresto.

Nolasco, fue detenido por agentes del FBI  y policías estatales el 23 de febrero del 2007, quienes llevaban a cabo un operativo anti drogas.

Un agente encubierto llamó al celular de Nolasco y le ofreció comprar $150 dólares de cocaína. Nolasco le pasó el teléfono a una mujer que lo acompañaba en su vehículo y ella habló con el federal.

Acordaron encontrarse en el estacionamiento de la calle principal de Methuen, cerca de la Plaza Monumental, donde se llevó a cabo la transacción.

El informe dice que el encubierto compró $100 dólares de Crack a la mujer, pero antes de hacerlo, miró a Nolasco, quien asintió afirmativamente con la cabeza.

El dominicano y la acompañante, fueron  arrestados posteriormente en la Ruta 125, siendo acusados de narcotráfico, conspiración y distribución de drogas cerca de una escuela.

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