Dominicano mata de una trompada un italiano en El Bronx
Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK,-Después de una activa búsqueda de varios días por parte de la policía, para capturar al dominicano por la muerte de una trompada del italiano Oliver D’Orio, turista italiano que residía en Suiza, el dominicano Brownie López de 19 años de edad, decidió entregarse en el cuartel 48 de El Bronx para enfrentar las acusaciones de homicidio.
No hizo falta aparataje.
El acusado, vistiendo camiseta de verano y una gorra de los Yankees de Nueva York, fue escoltado por un oficial de Asuntos de la Comunidad, para ser procesado en la referida comisaría, poco después de hablar con medios locales, a los que les dijo que en ningún momento tuvo la intención de matar al italiano.
López, dijo que el europeo, lo enfrentó en el interior de la bodega «Guerrero Deli», donde lo insultó y luego lo siguió afuera del negocio, para buscar pelea.
En el video de seguridad, se ve al dominicano, cuando ni siquiera dejó que el italiano se «cuadrara» y le propinó el contundente puñetazo que lo derribó instantáneamente al pavimento, de donde no pudo pararse.
Entre sollozos y recordando que ayer domingo 25 de mayo, era el día de las madres dominicanas, López, se mostró virtualmente arrepentido.
«Nunca pensé que lo iba a matar de una trompá», señaló.
López, enfrenta cargos de homicidio y asalto agravado en primer grado.
«Lamento mucho, porque no quise darle para matarlo, pero él (el italiano) fue quien comenzó todo, incluso contra un amigo mío y usó insultos y palabras soeces, contra nosotros», relató el dominicano. Señaló que todo el mundo lo está apoyando.
En la imagen, se aprecia al italiano, cuando se quita la camisa para enfrentarse a López. El propio acusado, habló con alguien para que se llamara una ambulancia que según testigos, tardó en llegar a la escena y D´Orio, murió en el hospital.
«Claro, tengo que entregarme, estoy haciendo lo correcto, No tengo que huir, porque no hice nada y sé que hay algunas gentes que piensan que fue que yo lo maté a propósito», explicó López.
«El, se quitó el polo shirt para darme, yo estaba muy nervioso y entonces, le tiré una trompá», agregó el acusado sin poder controlar las lágrimas.
La policía distribuyó miles de afiches con la imagen de López, captada por la cámara de seguridad y ofreció una recompensa de $2.000 dólares.
