Jeter es el Yankee Ideal
Por Enrique Rojas, ESPN Deportes
Juego Cruzado: El «Capitán Yankee» superó a Babe Ruth
NUEVA YORK — Derek Jeter no es Babe Ruth, Lou Gehrig, Mickey Mantle o Joe DiMaggio, al menos no en el aspecto ofensivo. Pero es muy posible que al final de sus días como jugador, «El Capitán» haya superado a sus ilustres antecesores en la disputa del reconocimiento no-oficial de «Yankee ideal de todos los tiempos».
Ruth, quien no inventó el jonrón, pero definitivamente fue quien patentizó la forma más económica de anotar carreras, es el papá de los peloteros, de todos, de aquí o allá. Punto.
«El Bambino» bateó .342 con 714 jonrones, 2,213 carreras empujadas y un porcentaje de embasamiento vitalicio de ¡.474! Pero hay dos argumentos irrefutables contra el «Sultán del Swing» para descalificarlo ante Jeter.
El primero y menos importante es el poco decoroso comportamiento público de Ruth, quien una vez fue multado con $5,000 dólares (el sueldo del año de los otros peloteros que no se llamaban Ruth) por sus excesos, que incluyeron agredir al manager Miller Huggins y burlarse de todas las reglas existentes.
El segundo, y más determinante para el caso que nos atañe, Ruth vistió la camiseta de Boston, no una, sino ¡dos veces! Antes de comenzar a pegar un jonrón cada 8 turnos con los Yankees, Ruth fue lanzador de los Medias Rojas por seis temporadas y el último año de su carrera, 1935, lo jugó con los Bravos de Boston de la Liga Nacional.
Ruth no tuvo la culpa ni de haber jugado con Medias Rojas ni de haber sido cambiado a los Yankees, pero en esta rivalidad el dato importa.
Mantle fue un atleta prodigioso que pese a las lesiones de rodillas pudo batear 536 jonrones y ganar una triple corona, pero su afición por el alcohol superaba la que tenía por el béisbol y dificilmente encaja en el rol de modelo a seguir.
DiMaggio tuvo una carrera corta (13 años), pero extraordinariamente buena como para ganar tres premios de Jugador Más Valioso y entrar sin problemas a Cooperstown. Sin embargo, su asociación con mafiosos reconocidos de Nueva York representan un impedimento para ser considerado como la cara histórica de los Yankees.
De acuerdo al libro «Joe DiMaggio: La historia del héroe», de Richard Ben Cramer, el antiguo jardinero central fue protegido y socio de Frank Costello y otros «pezonovantes» de las familias mafiosas de Nueva York y New Jersey.
Costello fue un compinche de Charlie «Lucky» Luciano que llegó a ser jefe de la Familia Genovese. El personaje «Vito Corleone» de «El Padrino» es basado en Costello.
A DiMaggio nunca se le ha acusado de haber participado en ninguna trama turbia contra la salud del béisbol, pero mi abuela, una sabia mujer de campo que nunca fue a la escuela, decía: «Dime con quien andas y te diré quien eres».
Ese subjetivo ejercicio de eliminación simple nos lleva a una final entre Gehrig y Jeter para encontrar el Yankee ideal de todos los tiempos.
Gehrig, quien bateó .340 con 493 jonrones y 1,995 carreras impulsadas en una carrera recortada por una enfermedad mortal, fue el pelotero ejemplar de la franquicia Yankees hasta la llegada de Jeter.
Gehrig jugó al más alto nivel, y sin descansar por 2,130 partidos, al mismo tiempo que evitó que las luces de Nueva York quemaran sus celulas grises. Mientras Ruth era el divo de los medios, «El Caballo de Hierro» solamente aparecía en las reseñas de los juegos por su desempeño en el campo (más o menos, en menor escala, lo que sucede actualmente con Alex Rodriguez y Jeter).
Gehrig fue el octavo capitán de los Yankees, pero más por su comportamiento que por su condición de voz principal en el camerino. Jeter es el 14to jugador que ostenta una «C» junto a su nombre en la historia de la franquicia más ganadora de los deportes profesionales.
A diferencia de Jeter, Gehrig no tuvo que manejar la presión de la era de SportCenter, Internet, Twitter, Facebook, Youtube y los paparazzi escondidos en restaurantes, patios y garages de los famosos. Hasta ahora, DJ ha combinado a la perfección los roles de vocero y estrella del equipo.
Jeter, quien juega el campocorto, la posición ‘premium’ del juego, aparentemente se dirige a una carrera de más de 20 años exclusivamente con los Yankees. Batea .315, ha ganado cuatro Guantes de Oro y cinco campeonatos y podría retirarse con 3,500 hits, 2 mil anotadas, 1,500 empujadas, 250 jonrones y 350 bases robadas.
El domingo, Jeter conectó dos imparables para totalizar 2,875 en su carrera y superar a Ruth (2,873) en el puesto #39 de la historia. El lunes agregó otro y empató con Mel Ott en el siguiente escalón.
«Ruth significa mucho para esta organización y cada vez que pueda pasarle en algo será grandioso», dijo Jeter, quien no solamente posee el récord de hits de los Yankees, sino que comparte con Ott, quien jugó toda su carrera con los Gigantes, el récord de más hits en un uniforme de Nueva York.
«No pienso mucho en las marcas personales, sino en ganar campeonatos», dijo Jeter, quien ha repetido una y otra vez que jamás se compararía con Ruth u otro gran Yankee del pasado.
Al igual que Ruth, Gehrig, Mantle, DiMaggio, Yogi Berra y Phil Rizzutto, entre otros, Jeter tendrá su #2 retirado y sendas placas en el Parque de los Monumentos en CF del nuevo Yankee Stadium y en el Salón de la Fama de Cooperstown.
Jeter no es Ruth y es poco probable que él u otro jugador amenace la imagen de semidiós que en el béisbol posee El Bambino, pero en la franquicia de los Yankees, «El Capitán» ha sido el representante por excelencia.
