La OEA supervisará las elecciones en Haití desde cuatro meses antes de la votación

Puerto Príncipe- EFE- La Organización de Estados Americanos (OEA) y la Comunidad del Caribe (Caricom) integrarán una misión de observación para las elecciones de Haití del próximo 28 de noviembre que se instalará el 1 de agosto en el país, donde permanecerá hasta después del escritinio.

Cerca de un centenar de personas conformarán esta misión que, por primera vez, supervisará las actividades electorales y la campaña electoral, además de las votaciones y el recuento de papeletas, informó hoy la emisora Radio Metropole en su página digital.

Las elecciones tendrán lugar diez meses después del devastador terremoto de siete grados que el pasado 12 de enero causó la muerte de unas 300.000 personas, otros tantos heridos y 1,5 millones de afectados.

Se escogerá un tercio del Senado, que está compuesto por 30 miembros, y la totalidad de la Cámara de Diputados, integrada por 99.

Para esos comicios se han inscrito más de 900 candidatos, de los cuales 95 aspiran a lograr un escaño en el Senado.

Las candidaturas pertenecen a 55 partidos y fueron aprobadas para las elecciones que iban a tener lugar el 28 de febrero pasado, que fueron aplazadas debido al terremoto.

El 28 de noviembre se celebrarán también elecciones presidenciales y los aspirantes podrán registrarse entre el 1 y el 7 de agosto, según el calendario confirmado por el Consejo Electoral Provisional (CEP).

Está previsto que los expertos de la misión de observación lleguen a Haití el próximo 1 de agosto, anunció el jefe de la misión de estabilización de la ONU en el país antillano, Edmond Mulet, quien destacó la importancia que estas elecciones tienen para la comunidad internacional.

Agregó que la comunidad internacional desea que las elecciones sean creíbles, inclusivas y democráticas y señaló que un proceso electoral problemático podría dar lugar a un clima de inestabilidad.

Mulet expresó su apoyo al Gobierno haitiano por disponer el inicio del proceso electoral y se opuso al aplazamiento de los comicios, como pretenden algunos sectores políticos, por considerar que un Gobierno de transición no sería beneficioso para la democracia haitiana.