Movie Suite© por José D’Laura

El Oscar al Best Foreign Language Film (que conocemos comoMejor Película Extranjera) se instauró como categoría en 1956. Antes de esa fecha lo de Película Extranjera era un premio honorífico, no competitivo, es decir, que la Academia de Hollywood le reconocía su calidad a un filme producido fuera de Estados Unidos.

En ese sentido, la Academia ya había reconocido notables obras del neorrealismo: El limpiabotas (1947) y El ladrón de bicicletas (1949), ambas del Maestro Vittorio de Sica. También Le Mura di Malapaga (1950), la joya de René Clément que fue abanderada por Francia e Italia, cosa prohibida por las actuales reglas del premio.

Cuando se estableció la categoría, la inauguró La Strada de Federico Fellini, quien repitió al año siguiente con Las noches de Cabiria (1957).

El mismo Fellini volvió a ganar en 1963 con su Obra Maestra, 8 ½y, al año siguiente, Vittorio de Sica con Ayer, hoy y mañana.

Italia continuó con su dominio en la categoría en 1970 conCiudadano bajo sospecha, de Elio Petri, y repitió al año siguiente con El jardín de los Finzi-Contini, de Vittorio de Sica.

El Maestro Fellini volvió a la carga con Amarcord y se llevó otro Oscar en 1974.

Italia ha sumado 3 Oscars más en fechas recientes: Cinema Paradiso (1989, Guiseppe Tornatore), Mediterráneo (1991, Gabriele Salvatore) y La vida es bella (1998, Roberto Benigni).

Si los cuentan, son 13 Oscars de Mejor Película Extranjera, dueños absolutos de la categoría. Francia le pisa los talones con 12 Oscars y luego hay un triple empate entre España, Japón y Rusia, con 4 Oscars para cada país.

El próximo 2 de marzo, Italia sumará el Oscar 14 con su candidataLa gran belleza, de Paolo Sorrentino. No voy a hablar aquí de la herencia de su director de los ambientes y personajes de Fellini, ni de la destreza técnica de su canto de amor a Roma, la Ciudad Eterna. Va a ganar porque este filme ha seducido a Hollywood con su encanto, con su contagiosa alegría, incluido un merengue de Peña Suazo y la Banda Gorda. He dicho.