Tres dominicanos acusados de brutal asesinato a golpes contra un compatriota en Rhode Island

Miguel Cruz Tejada

NUEVA YORK,- Un dominicano y dos cómplices, fueron acusados por el brutal asesinato de su compatriota Víctor Báez, a quien mataron a golpes el 30 de enero del 2012, pero la víctima murió en el hospital el 26 de mayo, cuatro meses más tarde.

Carlos Ríos (El Gambao), fue procesado ayer jueves en la Corte Criminal de la ciudad de Warwick en Rhode Island, ante el juez de distrito William Kent Clifton, cuatro meses después que su amigo y cómplice Manuel Reyes Sánchez, fuera arrestado en un resort de Miami, y acusado por el crimen. Un tercer criollo que es activamente buscado, no ha sido identificado.

Reyes Sánchez, trabajaba en el resort como salvavidas en el centro recreativo.

Ríos, de quien los fiscales dijeron que fue deportado a la República Dominicana por violación a las leyes migratorias de Estados Unidos y reentró ilegal, usando el nombre de su hijo Ricardo Arias, condenado a cadena perpetua por el asesinato de la estudiante Aynis Vargas de 12 años, estaba utilizando también otros alias.

Ríos, renunció a la repatriación desde Estados Unidos, para enfrentar cargos de asesinato y conspiración en Rhode Island. Dio una fecha nacimiento distinta a la real, 39 años, cuando tiene 49 y se le descubrió que usaba las identidades ajenas para tratar de evadir la justicia.

Durante la audiencia en la corte, Ríos, estaba con el uniforme blanco de los presos criminales, esposado, evadía las cámaras de frente y se mantuvo cabizbajo, hablando a través de un intérprete en español.

El caso fue remitido por el juez Clifton a un Gran Jurado que determinará las acusaciones contra el dominicano.

Entre tanto la Policía de Inmigración y Aduanas (ICE), tiene una orden de arresto contra Ríos, que sigue sujeto a otra deportación.

Ríos, fue detenido gracias a la confesión de Reyes Sánchez que lo implicó en el asesinato de Báez y podría testificar en su contra en un eventual juicio, si el primero no se declara culpable.

Fue detenido en la casa de un amigo, en la calle United en Boston.

Los detectives que investigaron el asesinato, dijeron que se pasaron dos años para dar con el paradero de los acusados, debido a que usaban diferentes identidades y algunos encarcelados fuera del estado y con procesos de deportación.

Los fiscales declinaron comentar si hay otros sospechosos involucrados en el caso, pero se aseguró, que un tercer hombre es buscado por las autoridades.

Ríos, tendrá que ser presentado de nuevo en el tribunal este 19 de junio, mientras Reyes Sánchez permanece detenido sin derecho a fianza, bajo cargos de conspiración y asesinato.

La fiscalía dijo que la víctima, fue emboscada, después de una discusión fuera de un club nocturno con Ríos, quien decidió matarlo, porque Báez, supuestamente le había faltado el «respeto».

En el club, se celebraba una fiesta de cumpleaños de Ríos y en medio de la disputa, se enfrascaron en una pelea de borrachos, en la que también participó un hermano de Ríos.

Báez, abordó un taxi para ir a su casa situada en el 114 de la Tercera Avenida, pero fue seguido por Ríos, Reyes Sánchez y el tercer sospechoso, quienes esperaron que salieran del taxi y lo atacaron.

La paliza fue tan brutal, que sangre de la víctima, quedó dentro de los zapatos de Reyes Sánchez.

Después de dejarlo inconsciente en el pavimento, le pasaron un carro por encima, dejándolo moribundo. Policías, encontraron posteriormente el cuerpo machacado de Báez y lo ingresaron en el hospital, donde estuvo cuatro meses en cuidados intensivos y estado crítico, sucumbiendo a las heridas y contusiones.

Báez, tenía dos hijos y estaba criando un hijastro.