Roberto Obando Prestol se vistió de ciudadanocomún y se puso a hacer una fila para ingresara la temida cárcel de La Victoria.
Con una gorra de pelotero y unas gafas oscuras el funcionario hizo dos filas, en las cuales tuvo que pagar a dos custodias para poder ingresar en la prisión.
De inmediato el funcionario no informó que sanción pedirá aplicar a los policías delincuentes, de los cuales estan llenas las prisiones dominicanas.
Debido a esta comprobación de la delincuencia policial en La Victoria el director de Prisiones anunció un plan piloto para proteger a los familiares de los presos de los agentes bandidos que exigen dinero.
El piloto fue iniciado en la Cárcel de Najayo, con buenos resultados.
En el Penal de La Victoria el ingreso de la visita a la prisión ha sido agilizado.