• 20 abril, 2024

Arzobispado rechaza aumento sueldos concejales

editorial CaminoSANTIAGO.- El semanario Camino rechazó la decisión de los concejales de esta ciudad y otras localidades del país, de aumentarse los sueldos de manera considerable, al tiempo de acusarlos de solo pensar en sus intereses particulares.

De manera fundamental, el vocero escrito del Arzobispado santiaguero critica la actitud de los ediles locales, quienes recientemente decidieron elevarse sus salarios de 130 mil a 210 mil pesos mensuales.

La posición del periódico religioso aparecerá en su edición del próximo domingo en el que, con el título de “Burla y provocación”, dice que ese grupo de funcionarios municipales decidió tal cosa por “la ambición de conseguir dinero a costa de los fondos públicos, unida al afán de poder están volviendo triza la imagen de muchos políticos dominicanos”.

Dice que los concejales que actuaron de esa manera sólo piensan en sus intereses particulares “aunque a su lado vean a hijos de esta patria amada viviendo en condiciones de extrema pobreza, mientras van haciendo del erario una piñata”.

Con relación a lo decidido en el Concejo de esta ciudad, Camino sostiene que esa decisión es un acto de violencia contra una población carente de seguridad ciudadana y huérfana de servicios básicos eficientes.

Por eso, el semanario Camino estima que las instituciones estatales “no pueden continuar dando el mal ejemplo de un despilfarro abusivo, mientras hay miles de familias que viven en una austeridad obligada y eterna”.

Por ello, plantea poner freno a esas acciones que define como “antipatrióticas” y que esta ciudad y las demás localidades donde se está dando esta situación merecen respeto.

“No podemos seguir indiferentes, viendo el aumento de sueldos entre los miembros de algunas alcaldías haciendo un festival con el dinero del pueblo”, indica, para a seguidas agregar que “ellos están haciendo suyo el refrán que dice: A lo que nada nos cuesta, hagámoslo fiesta”.

Ante acciones como esa, Camino pregunta hacia dónde fue a dormir la vocación de servicio de los políticos, y las promesas electorales de que lucharían por las comunidades.

Estima que se trata de un desatino y que, ante esas decisiones, la sociedad dominicana merece un desagravio y que la mejor forma de hacerlo “es echando hacia atrás este aumento salarial, y de ahora en adelante pensar más en el bien común” y que solo así “construiremos la Patria que soñaron nuestros libertadores”.

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