Asimismo, expresó su preocupación por la continua violencia en Túnez y realizó un llamado a la “restauración completa del imperio de la ley”, señaló un vocero de la ONU.
La violencia desatada en Túnez hace un mes ha dejado 78 personas muertas y 94 heridos por las protestas contra el régimen de El Abidine Ben Alí, quien gobernó el país desde hace 23 años, pero que se vio obligado a huir debido a las fuertes manifestaciones de protesta.
Tras la huida de Ben Alí, se formó un nuevo gobierno liderado por Mohamed Ghannouchi, primer ministro del régimen, quien convocó a miembros de la oposición para integrarlo.
El régimen de Ben Alí es señalado como uno de los más corruptos y la última denuncia asegura que su esposa, Leila Trabelsi, habría sacado del país 1.5 toneladas de oro, valorizado en unos 60 millones de dólares, según fuentes del servicio secreto francés.
La población de Túnez ha manifestado su rechazo a cualquier rezago del gabinete de Ben Alí en el nuevo gobierno.