El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, admitió haber quemado con un soldador caliente la pulsera electrónica que monitorea su ubicación, afirmando que lo hizo “por curiosidad”, de acuerdo con el informe ofrecido por una funcionaria penitenciaria.
Un video divulgado por las autoridades muestra el dispositivo con daños visibles por exposición al fuego, lo que obligó a sustituirlo por una tobillera electrónica. El reemplazo se realizó este sábado, pocas horas antes de que el Tribunal Supremo Federal (TSF) revocara su arresto domiciliario y ordenara prisión preventiva, argumentando riesgo de fuga.