El Aeropuerto Heathrow informó que el problema técnico afecta la facturación y el depósito de equipaje, lo que está generando demoras en los vuelos de salida. Situación similar se reportó en los aeropuertos de Bruselas y Berlín, que confirmaron afectaciones en comunicados oficiales.
La empresa RTX, matriz de Collins Aerospace, reconoció la existencia de una “interrupción cibernética” en su software, sin precisar los aeropuertos afectados. Explicó que el impacto se limita al check-in electrónico, pero que las aerolíneas pueden aplicar procedimientos manuales como medida temporal.
En Bruselas, las autoridades aeroportuarias señalaron que el ataque, ocurrido el viernes en la noche, dejó inoperantes los sistemas automatizados. Hasta este sábado, al menos 10 vuelos habían sido cancelados y se reportaba un retraso promedio de una hora en las salidas.
Por su parte, Delta Air Lines aseguró que el impacto en sus operaciones será mínimo, ya que implementó soluciones alternativas. El Aeropuerto de Berlín advirtió a los pasajeros que los tiempos de espera en facturación serían más largos, aunque dijo estar trabajando en una solución rápida.
El Aeropuerto de Francfort, el más grande de Alemania, y el Aeropuerto de Zúrich informaron que no fueron afectados por el ataque. De igual forma, la aerolínea EasyJet indicó que opera con normalidad, mientras que Ryanair y British Airways (IAG) no ofrecieron declaraciones inmediatas.
En tanto, el viceprimer ministro polaco y ministro de Asuntos Digitales, Krzysztof Gawkowski, confirmó que no existen indicios de amenazas contra aeropuertos en Polonia. La ministra de Transporte del Reino Unido, Heidi Alexander, informó que recibe actualizaciones periódicas sobre la situación.
El incidente ha encendido las alarmas en la industria aérea europea, que se encuentra a la espera de que el proveedor resuelva la falla y restablezca plenamente sus sistemas.