Por Ramón Mercedes
En su discurso, el presidente de CCDDUSA, Santiago Cruz, manifestó que la institución ha dejado huellas imborrables al cumplir cabalmente con la responsabilidad comunitaria, cultural, deportiva y la enseñanza a nuestra futura generación del legado de nuestros fundadores.
“Nuestro respeto a los fundadores, ex presidentes y todos lo que han contribuido desde distintas perspectivas a prolongar la obra de existencia indefinida de nuestra organización”, dijo.
“Concomitantemente nuestros inicios como institución, fruto de esos quisqueyanos, capaces de descubrir una necesidad social y proyectar significativos y persistentes esfuerzos hacia su logro, los que con el paso del tiempo constituye una realidad que supera las expectativas de origen.
Y añadió, “aprendiendo así la importancia de mantener los vínculos con nuestras raíces y llevando siempre muy en alto el nombre de la República Dominicana.
También hablaron el congresista Adriano Espaillat y el médico Rafael Lantigua, entre otros, quienes destacaron la fructífera labor que ha venido desempeñando el club a favor de la comunidad.
Asistieron políticos electos, profesionales, empresarios, activistas comunitarios, artistas, periodistas, funcionarios del gobierno dominicano, comerciantes y directivos de clubes y asociaciones, entre otros, quienes disfrutaron de un exquisito bufet, diferentes bebidas y ambiente bailable.
La doctora Milagros Vásquez, ex presidente de la entidad y Pedro Nieves sirvieron como maestros de ceremonia. Se guardó un minuto de silencio en honor a los socios fallecidos, hubo una presentación de baile folklórico y se entregaron placas de reconocimiento a diversas personalidades, a los dos socios con más de 25 años, José García y Pedro Martínez, además al socio meritorio 2019, Juan Vangrieken.
La actual directiva, además de Cruz, está compuesta por Floralda Vega, vicepresente; Jorge Reynoso, secretario general; José Montán, Tesorero; Ramón Rodríguez, deportes; Miriam Abreu, rama femenina, y José Rodríguez, relaciones públicas.
Asimismo, Rafael Antonio, artes y cultura; Cristina Rodríguez, gobernadora; María Gómez, acta y correspondencia; Edwin Acosta, censor, y como vocales a Hugo Capellán y José Jiménez.