Dominicana hizo explotar edificio en Brooklyn con gasolina concluye investigación
Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK.- La dominicana Francisca Figueroa de 48 años de edad (nativa de San Francisco de Macorís) y quien murió junto a su compatriota Ligia Puello de 64 (de San Cristóbal), durante la explosión de un edificio de tres pisos en Brooklyn, habría usado gasolina para quemar la estructura que estalló a causa de las llamas, concluyó la investigación divulgada ayer jueves por el Departamento de Bomberos y la Policía.
En la explosión que arrasó el edificio de apartamentos y mató a las dos mujeres dominicanas en el interior, se descartó un incendio premeditado después que los investigadores llegaron a la conclusión de que una de las mujeres vertió gasolina en un hueco de la escalera que se prendió en llamas.
Figueroa, de 48 años, vivía en el segundo piso del edificio situado en el sector Borough Park, de donde había sido desalojada después de una disputa con el arrendatario y al parecer, originó el incendio por venganza, dijeron fuentes de la investigación.
Ella incendió las escaleras con la gasolina y el humo se extendió por todo el edificio, estallando en cuanto se inició el fuego.
Los investigadores creían originalmente que se trataba de una fuga de gas natural que causó la explosión, que también mató a Puello que vivía en el tercer piso, e hirió a una docena de otros inquilinos.
Después de entrevistar a los familiares de Figueroa y otros testigos, los investigadores concluyeron que se trató de un incendio provocado.
«Los investigadores de incendios determinaron que había un líquido inflamable utilizado. Era gasolina», confirmó un portavoz del Departamento de Bomberos.
Figueroa, dijeron las autoridades, también se puso en contacto con sus seres queridos y familiares para despedirse.
Ella era la dueña de la peluquería “Park Slope Franchezka Unisex” y madre de dos adolescentes
Figueroa había sido desalojada por el propietario del edificio y se suponía que abandonaría el lugar dos días antes de la tragedia provocada el 3 de octubre.
Los vecinos dijeron que ella había estado enfrascada en una agria disputa con el propietario.
Figueroa le había dicho a sus familiares que se iba a la casa para recoger sus pertenencias, pero en vez de irse, provocó el incendio, dejando su carro cerca del edificio y con su teléfono celular en el interior.
Sus dos hijos, un varón y una hembra de 15 y 16 años de edad, no estaban en la casa en el momento de la explosión.
Los policías descubrieron el cadáver de la señora Puello, descrita por sus vecinos como una mujer dulce y tranquila que vivía sola, en el hueco de la escalera del edificio.
