Miguel Cruz Tejada
Castillo, quien llegó recientemente al conjunto, jugó en un equipo que patrocinaron los Mets de Nueva York y ahora se destaca en otro que apoyan los Yankees.
El dominicano expresa que también fue motivado por los jugadores.
Relata que jugaba pelota en la República Dominicana y llegó por esa vía a Nueva York hace tres años después de un accidente.
«En mi país, todos somos aficionados al béisbol, así que siempre juego eso, y no iba a parar por el accidente», dijo Castillo.
Las prácticas se realizan todos los jueves en los terrenos del Parque Forest y su entrenador Joseph Méndez, lo describe como muy competitivo.
El técnico dice que no es diferente y que aunque estén en sillas de ruedas, tienen todavía el mismo impulso para batear bien y hacer buenas jugadas.
Méndez es un jugador de 15 años y entrenador. Se unió al equipo después de un accidente paralizante.
Dijo que era un policía encubierto de Nueva York, pero sufrió un accidente y comenzó a sentirse emocionalmente muy mal por el trauma de quedar inválido.
Para muchos de estos jugadores toma tiempo integrarse y recuperar el ánimo, y muchos otros se destacan en otros deportes, como baloncesto y el fútbol soccer, que son una parte importante de su curación mental, y a veces también física.
Algunos de ellos tuvieron que ser sometidos a varias cirugías en los hospitales.
Ellos juegan desde las 5:30 de la tarde hasta el anochecer, y siempre hay sillas de ruedas extras para otros discapacitados que quieran probar.
