Montevideo. El expresidente uruguayo José Mujica enfrenta la fase terminal de un cáncer de esófago, según confirmó su esposa y exvicepresidenta Lucía Topolansky a un medio local. Mujica, de 89 años, se encuentra bajo cuidados paliativos para controlar el dolor y vivir este momento «lo mejor posible», aseguró Topolansky en declaraciones a la radio Sarandí.
En enero, Mujica había informado públicamente que la enfermedad se había extendido por su cuerpo y que no continuaría con tratamientos médicos agresivos debido a su avanzada edad.
La situación actual del exmandatario (quien gobernó entre 2010 y 2015) fue catalogada como «terminal» por su esposa. Su delicado estado de salud también explicó su ausencia en las recientes elecciones regionales del domingo, donde la izquierda retuvo el poder en Montevideo. Según Topolansky, el traslado le resultaba demasiado exigente, y su médica recomendó evitarlo.
Durante la jornada electoral, el actual presidente uruguayo, Yamandú Orsi, estrechamente vinculado a Mujica y considerado su heredero político, pidió respetar la privacidad del exlíder. “Todos debemos aportar a que en todas nuestras etapas de la vida la dignidad sea la clave. No hay que enloquecerlo, hay que dejarlo tranquilo”, declaró Orsi.
Conocido mundialmente por su estilo de vida austero y su discurso crítico del consumismo, Mujica se convirtió en un símbolo de la izquierda latinoamericana y fue apodado internacionalmente como “el presidente más pobre del mundo”, aunque él mismo rechazó ese calificativo.
