NUEVA YORK,- Tanto los candidatos por el distrito 13 a la Cámara de Representantes, la Junta de Elecciones, analistas y observadores locales, esperan una votación masiva de latinos inscritos en las primarias demócratas de este martes 24 de junio, lo que aseguraría el triunfo del senador estatal dominicano Adriano Espaillat, frente al congresista reeleccionista Charles Rangel.
La expectativa, se genera debido a lo febril de la campaña, caracterizada del lado de Rangel, por distribución de propaganda, literatura y pronunciamientos sucios y racistas.
Es la primera vez, que en un distrito electoral de los Estados Unidos, se ve una campaña de ese nivel, dadas las características de los procesos electorales norteamericanos que tradicionalmente se montan sin estridencias ni confrontaciones altisonantes.
La iniciativa de comenzar la brusquedad en los intercambios de discursos, incluyendo los tres debates que se realizaron en el ínterin de la campaña, fueron por parte de Rangel, quien en el segundo debate, preguntó que «¿qué carajo ha hecho Espaillat, además de decir que es dominicano?».
Ese exabrupto del anciano congresista de 84 años de edad y con 43 en la Cámara de Representantes, hirió el orgullo dominicano y tuvo respuestas en una actividad que se hizo en el Centro Cultural Malcom X del Alto Manhattan, en la que el liderazgo criollo, respondió al insulto, nucléandose alrededor de la candidatura de Espaillat.
El sábado, miles de dominicanos y latinos de diferentes países, salieron a las calles para identificarse con la marcha caravana, encabezada por Espaillat y parte de los más prominentes líderes demócratas de Nueva York.
Previo a esas actividades, Espaillat, contó con los respaldos de los ex presidentes Leonel Fernández del PLD, Hipólito Mejía del PRD, Luis Abinader, también del partido blanco y del PRSC.
De igual modo, concitó espaldarazos de reputadas figuras políticas locales como la presidenta del Consejo Municipal Melissa Mark Viverito, que lidera el la otrora trinchera electoral de Rangel en el Oeste de Harlem, el asambleísta Robert Rodríguez, también de esa demarcación, la Cámara de Comercio Mexico Americana de Nueva York, el presidente del condado de El Bronx, Rubén Díaz Junior, y muchos otros, que hace dos años estuvieron en la trinchera de Rangel.
En el 2012, Espaillat denunció irregularidades en las votaciones y este lunes, el Procurador General del Estado, Eric Schneiderman, anunció que para este martes 24, abrirá una línea telefónica para asegurar el derecho de los votantes y recibir quejas y denuncias, en caso de que se produzcan irregularidades que pudieran suprimir ese derecho.
El domingo, Espaillat junto a Mark Viverito, encabezó una movilización en Harlem, donde volvió a recibir el apoyo de cientos de partidarios.
El distrito 13, ampliado por los diseñadores del mapa electoral de Nueva York, a sectores de El Bronx, para abrir espacios a figuras emergentes, cuenta con un 58% de latinos, de ellos, mayoría dominicana por lo que los manejadores de la campaña de Espaillat creen que los hispanos salen a votar masivamente, su victoria está asegurada.
Por su parte Rangel, quien consiguió algunos respaldos burocráticos y simbólicos, pero no de base como los de los senadores federales Charles Schumer y Cristie Gillibrand, y el gobernador Andrew Cuomo, quedó desamparado por su antiguo «hermano» de raza y lucha, reverendo Al Sharpton, quien empujó la candidatura del pastor Michael Walrond, con lo que se debilitaría el voto a favor de Rangel.
Pero el «viejo zorro», como le llaman sus allegados, hizo la que cree que es una «jugada» maestra al reclutar a la dominicana Yolanda García en El Bronx, a quien su equipo le colectó más de 6.000 firmas en pocos días y financió su registración en la Junta de Elecciones.
Con esa «jugada», Rangel está esperanzado en que los votos que pudiera conseguir la desconocida «activista» y quien admite públicamente que no habla inglés, se le restarían a Espaillat.
Una encuesta hecha por la Escuela de Ciencias Sociales de Siena College y que es muy contradictoria, reveló que el 53% de los hispanos votarán por Espaillat, en un distrito donde representan el 58%, pero le da el «triunfo» al reeleccionista por unos supuestos 13 puntos.
El sondeo, ha sido cuestionado y criticado por figuras tan creíbles como las del senador Díaz, quien sostiene que esa encuesta es claramente manipulada y tiene la intención de confundir para que una gran cantidad de latinos, se den por perdidos y no salgan a votar.
Dijo que en el 2012, ocurrió lo mismo.