
Asimismo, la red social tiene tres meses para dejar de recolectar sin consentimiento información sobre internautas que visitan la página web sin tener su propia cuenta de Facebook, bajo amenaza de multa.
De esta manera, Francia busca llevar a efecto la decisión judicial de la Corte Europea de Justicia, que el pasado mes de octubre reconoció la invalidez del acuerdo transatlántico sobre transferencia de datos, conocido como ‘safe harbor’.
