Haití: La verdad no debe morir con Jean-Claude Duvalier
La muerte del ex gobernante haitiano Jean-Claude Duvalier no debe detener las investigaciones y actuaciones judiciales adeudados a miles de personas asesinadas, torturadas, detenidas arbitrariamente y desaparecido bajo su régimen, ha manifestado Amnistía Internacional este martes.
«La muerte de Jean-Claude Duvalier no debe ser usado para espantar los crímenes cometidos bajo su régimen. Toda una red de autoridades de la milicia de voluntarios y estatales también son sospechosos de perpetrar violaciónes de los derechos humanos bajo el mando de Duvalier. Estas personas también deben ser investigados y, si hay pruebas admisibles suficientes, procesados ??en juicios justos «, dijo Erika Guevara Rosas, Director para América de Amnistía Internacional.
«Este no es el último capítulo de este horrible episodio de la historia reciente de Haití. En su lugar, debe ser un recordatorio de que hay miles de víctimas que todavía merecen justicia, verdad y reparación para las violaciónes de los derechos humanos que sufrieron «.
En respuesta a la noticia de la muerte, el actual presidente de Haití, Michel Martelly, ha hablado de la reconciliación y la llamada Jean-Claude Duvalier un «verdadero hijo de Haití». En el pasado, el presidente Martelly ha insinuado en varias declaraciones públicas en perdonar al ex líder. A pesar de ser investigado por cargos de malversación, Jean-Claude Duvalier fue emitido con un pasaporte diplomático en 2013, y participó en varias ceremonias y eventos oficiales.
«Considerando que el Presidente Martelly podría haber expresado la compasión por los miles de víctimas de duvalierísmo y participó en la creación de recuerdos sobre los crímenes cometidos en ese momento, él voluntariamente decidió expresar» tristeza «y» simpatía «sólo para la familia de Duvalier. Esto es una bofetada en la cara de los derechos humanos y la lucha de las víctimas a la justicia «, dijo Erika Guevara.
Durante Presidencia- de Jean-Claude Duvalier entre 1971 y 1986 – las cárceles y centros de tortura se cobraron la vida de cientos de víctimas. Las detenciones arbitrarias, torturas, muertes bajo custodia, se informó regularmente desapariciones forzadas y homicidios políticos.
Autoridades haitianas destacaron los dirigentes políticos, periodistas, sindicalistas y aquellos sospechosos de ser opositores al gobierno. Detención ilegal también estaba muy extendida. Los detenidos permanecieron incomunicados durante largos períodos de tiempo y fueron sometidos con frecuencia a la tortura y los malos tratos.
Un arma clave del control del arsenal de Duvalier fue el uso de Voluntarios de la Seguridad Nacional o «tonton macoutes» («cocos»), ya que se conocieron. Esta milicia voluntaria asumió muchas de las tareas de la fuerza del ejército y la policía y fueron los responsables de la brutalidad extrema como mataron, torturaron, encarcelaron arbitrariamente o la desaparición forzada de personas impunemente. A mediados de la década de 1980, se estimaba que había 9.000 tonton macoutes en el trabajo.
«Durante 15 años, Jean-Claude Duvalier gobernó Haití con total desprecio por los derechos del pueblo haitiano. Los abusos contra los derechos humanos graves cometidas durante esos años aún permanecen envueltos en la más absoluta impunidad. Ahora, más que nunca, las autoridades haitianas deben mostrar voluntad política para investigar a los sospechosos de responsabilidad penal por violaciónes de derechos humanos «, dijo Erika Guevara.
Antecedentes:
En 1971 Jean-Claude Duvalier heredó el control de Haití de su padre François Duvalier después de supuestamente ser refrendado por el pueblo de Haití, en una votación de 2.391.916 a cero.
En 1986 huyó del país al exilio autoimpuesto en Francia.
En enero de 2011 regresó a Haití después del terremoto que asoló el país. A su regreso las autoridades volvieron a abrir una causa penal contra él, que enfrenta cargos de crímenes de lesa humanidad y graves violaciónes de los derechos humanos, como el asesinato y la tortura de opositores políticos, y de la corrupción.
En enero de 2012, un juez de instrucción dictaminó que Duvalier debe ser juzgado ante un tribunal de primera instancia sólo por malversación de fondos públicos. Tanto las víctimas de los derechos humanos y Duvalier apelaron la decisión.
El 20 de febrero de 2014, el Príncipe Puerto Corte de Apelaciones revocó la sentencia enero 2012 al afirmar que no puede haber una ley de prescripción para los crímenes contra la humanidad y que estos pueden ser procesados ??bajo la ley haitiana.
También reconoció que el proceso había hasta ahora erróneamente centrado sólo en Jean-Claude Duvalier.
Ordenó que los identificados por los demandantes como colaboradores para ser oídas por el tribunal, y que otros sospechosos de ser responsables de los abusos, se deben identificar.
El Tribunal nombró a uno de sus jueces para investigar más a fondo las denuncias de crímenes de lesa humanidad cometidos por Jean-Claude Duvalier y sus colaboradores. Sin embargo, hasta ahora las autoridades no han proporcionado recursos adicionales para el juez y publicación de los documentos oficiales que podrían ser útiles en el procedimiento.
