
Se trata de Julio Antonio Mezquita Santana, de 45 años de edad, a quien se le ocupó un tanque de gas propano color mamey, de 25 libras y una cajita de fósforos, con lo que pretendía cometer el hecho.
El labriego no logró su propósito, porque su esposa Marisol García González, de 48 años y sus cuatro hijos, dos mayores, un adolescente y un menor, lograron huir y salir a tiempo de la casa.
No sin antes el marido haberle ocasionado trauma contuso en el lado derecho de la cara a su mujer.
Al ser interrogado por los investigadores, Mezquita Santana manifestó que “está cansado de solo mantener a su familia y no lo respetan, pero que cuando lo soltaran los iba a matar a todos, si los encontraba en la casa”.
El caso fue apoderado el Ministerio Público para los fines legales correspondientes.
