Jiménez aboga medicina moderna llegue a toda RD
SANTIAGO.- El reconocido cardiólogo dominicano Héctor Bienvenido Jiménez, quien fue reconocido la noche del jueves por la sociedad santiaguera, en una ceremonia realizada en el Gran Teatro del Cibao, abogó porque la medicina moderna llegue a todas las comunidades del país.
El galeno, nativo de la ciudad noroestana de Dajabón y presidente del cuerpo médico del Hospital de la Universidad de Miami dijo que, aunque aquí están vigentes tecnologías de alto nivel, las mismas están limitadas y no llegan a toda la ciudadanía. El doctor Jiménez también fue jefe de cardiología y director del departamento de medicina de la Asociación Americana del Corazón, del condado de Dade.
Con el objetivo de que se masifique mucho más el sistema de salud de alta tecnología en el país, Jiménez prometió que tratará de que tal objetivo se logre, para lo cual contactará a las iglesias, instituciones caritativas y científicas “para que pueblo tenga la salud que merece”.
En la ceremonia se le entregó a Jiménez la llave de la ciudad de Santiago, que recibió de manos del alcalde Gilberto Serulle; la gobernadora provincial, Aura Toribio; el presidente del Concejo, Juan Carlos Liz y el edil Domingo Ureña, en atención a la resolución 209-2016, emitida por ese organismo el 14 de este mes.
Asimismo, una placa de reconocimiento que le entregaron los organizadores del acto, por su labor profesional desarrollada en hospitales de Estados Unidos, en beneficio de la comunidad latina, especialmente la dominicana.
El ceremonial fue organizado por los empresarios Ulises Polanco, Manuel Estrella, Rafael Sánchez Español, Guillermo Estrella Ramia y José Clase. Comenzó con una invocación realizada por el padre Prudencio Piña, en tanto que Sánchez Español tuvo a su cargo de la lectura de la semblanza de Jiménez. El ingeniero Rafael Bisonó Genao también se dirigió a los asistentes.
En el discurrir del acto se proyectó un documental sobre la vida del doctor Jiménez, quien residió y estudió en esta ciudad y se graduó de medicina en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, emigrando luego a Estados Unidos.
