Los antibióticos son un arma de doble filo para las infecciones del oído en los niños, según un análisis
Medline Plus- Un análisis reciente de investigaciones anteriores concluye que los antibióticos podrían ayudar a más niños con infecciones del oído a recuperarse rápidamente, aunque estos medicamentos también conllevan el riesgo de efectos secundarios.
Según el análisis, entre 4 y 10 por ciento de los niños experimenta efectos secundarios, como diarrea o sarpullido, por el uso de antibióticos.
«Si usted tiene cien niños sanos con infección aguda del oído, cerca de ochenta mejorarán simplemente con un analgésico y un antipirético de venta sin receta, pero si tratara los cien niños con antibióticos, curaría a 92 de ellos. Sin embargo, la cantidad de niños que se beneficiaría es similar a la cantidad de niños que experimentaría efectos secundarios, como diarrea y sarpullido», explicó la Dra. Tumaini Coker, profesora asistente de pediatría del Hospital Infantil de Mattel y de la Facultad de medicina David Geffen de la Universidad de California en Los Ángeles.
«Los padres necesitan sopesar realmente los riesgos y los beneficios del tratamiento si un niño tiene una infección del oído», dijo.
Además de hallar que su receta temprana ofrece algo de beneficio para el tratamiento de las infecciones del oído, los investigadores también encontraron que los antibióticos más nuevos con nombre de marca no parecían ser más efectivos que los de siempre, entre ellos la amoxicilina, que tienen versiones genéricas y más económicas.
«Los padres necesitan tener en cuenta que cuando un niño adquiere una infección del oído, el tratamiento con antibióticos no siempre podría ser la mejor opción», aseguró Coker, también investigadora de RAND Corporation, un instituto de investigación sin fines de lucro. «Además, para la mayoría de los niños sanos a los que se acaba de diagnosticar una infección del oído, no pudimos hallar evidencia de que los antibióticos más nuevos actuarán mejor que los más antiguos».
La infección aguda del oído (otitis media) es la razón más común por la que los antibióticos se recetan a los niños de los Estados Unidos, según la información de respaldo del estudio. El costo promedio de una infección del oído es de $350 por niño, que le termina costando a todo el sistema de atención de la salud unos $2.8 mil millones al año.
La reseña actual, realizada por el Centro de Práctica Basada en Evidencias del Sur de California, examinó el diagnóstico, la gestión y los resultados de las infecciones del oído en 135 estudios realizados entre 1999 y 2010 sobre la otitis media aguda.
Coker aseguró que el propósito de los análisis era «proporcionar la mejor evidencia para la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP), pues están revisando sus directrices para infecciones del oído de los niños».
Los nuevos análisis también hallaron que cuando los médicos usaban un otoscopio para examinar el oído de un niño, las señales de inflamación y enrojecimiento de la membrana timpánica son medios precisos de diagnosticar una infección aguda del oído.
Además, la reseña confirmó lo que los médicos habían sospechado que sucedería con la introducción de la vacuna neumocócica conjugada (PCV7): se redujo la cantidad de infecciones con las bacterias que cubre la vacuna. Lamentablemente, aumentaron las infecciones del oído causadas por otras bacterias.
Ninguno de los estudios revisados examinó el daño potencial a largo plazo del uso de antibióticos, como la resistencia a los antibióticos, anotaron los investigadores.
Los resultados del estudio aparecen en la edición del 17 de noviembre de la Journal of the American Medical Association.
Los expertos anotaron que esta reseña, como muchas que analizan estudios ya publicados, tienen limitaciones inherentes.
«El problema con este tipo de reseñas es que la mayoría de los estudios son antiguos», advirtió el Dr. Alejandro Hoberman, jefe de la división de pediatría académica general del Hospital Infantil de Pittsburgh. «Necesitamos mejores estudios con directrices más claras sobre inclusión diagnóstica sobre el uso de antibióticos», agregó, y anotó que una investigación de este tipo ya se está realizando.
Hoberman, del comité para el desarrollo de nuevas directrices de la AAP, aseguró que habrá un nuevo enfoque para mejorar el diagnóstico de las infecciones del oído para que aquellos niños que puedan beneficiarse más del tratamiento sean los que reciban los antibióticos.
Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare