Manifestación de duelo en funerales de dominicana asesinada en Boston
Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK,- Más de 200 personas, entre ellas deudos y autoridades locales, asistieron a los funerales de la dominicana Grisel Sánchez (Chichí), asesinada la semana pasada en Boston por una bala perdida, en una amplia manifestación de duelo que también se convirtió en rechazo a la ola de violencia que afecta esa ciudad de Massachusetts.
Con las manos entrelazadas, los familiares más cercanos de Sánchez, lloraban durante la misa en la iglesia San Pedro en Dorchester, antes del entierro de los restos de la madre que dejó tres hijos en la orfandad.
Sánchez, tenía 31 años de edad y caminaba desde su casa a una bodega a comprar cigarrillos, cuando uno de numerosos disparos la impactó en el sendero.
Los investigadores han dicho que no creen que ella era el blanco del tirador o los tiradores.
Hasta el momento, la policía no ha hecho arrestos en conexión con el crimen de la dominicana.
El reverendo Jack Ahern, quien celebró la ceremonia religiosa dijo que los familiares de Sánchez, tienen sobradas razones para estar enojados.
Botones y suéteres con la foto de Sánchez, eran exhibidas en las ropas de los concurrentes.
Otros llevaban cintas moradas en el lado izquierdo del pecho.
Los hijos de Sánchez tienen edades de 11, 14 y 13 años. El papá de la mujer asesinada lloró amargamente en la ceremonia y fue de los que ayudó a cargar el ataúd con el cuerpo de la hija.
El reverendo que la hija de Sánchez, Idalys Vásquez, ha estado asumiendo el papel de madre. “Ella tiene el corazón de su mamá”.
Sánchez fue asesinada el 28 de julio a las 10:30 de la noche, muriendo en la escena.
El oficiante la describió como una madre entregada a sus hijos, que siempre estaba luchando para formarlos correctamente.
El reverendo Ahern, recordó al comisionado de la policía en Boston, William B. Evans, que los hijos de Sánchez, siguen reclamando justicia.
“Ellos desean que la policía encuentre al asesino de su madre”, dijo el reverendo.
El área donde cayó muerta Sánchez, es considerada una zona de frecuentes tiroteos y con alto nivel de violencia.
