A lo largo de más de sesenta años fue un actor y testigo, de uno de los ciclos políticos con mayores cambios en la vida republicana de nuestro país, completando la experiencia traumática de la dictadura, exilio, retorno a las libertades y construcción del arduo proceso democrático con los altibajos propios de quienes participan como políticos en la vida pública, pero que no rehuyen esos retos.
Fue de los fundadores del Partido Revolucionario Social Cristiano, lo abandonó para integrar un grupo demócrata cristiano.
En 1963, Read Vittini fue de los seis firmantes del acta notarial que derrocó al primer gobierno constitucional y democrático elegido en el país desde 1924, el de Juan Bosch y el Partido Revolucionario, PRD. (Otro instrumento “jurídico” del golpe fue un manifiesto firmado por 25 generales y coroneles de las Fuerzas Armadas). Consecuencia directa de la acción fueron la revolución constitucionalista, la segunda invasión militar norteamericana y la muerte de cuatro mil dominicanos, combatientes y civiles.
A pesar de un sedicente antitrujillismo a lo largo de su obra, y de espaldas al asilamiento de 1960 y a la fundación de partidos, volvió a su redil doctrinario de origen en el neotrujillismo de Joaquín Balaguer, del que fue embajador en Washington, gobernador del Banco Central y consultor jurídico del Ejecutivo.