• 20 abril, 2024

Mecánico dominicano quemó mujer con soplete es condenado a 35 años a cadena perpetua

Miguel Cruz Tejada

Mecánico dominicano quemó mujer con soplete (1)NUEVA YORK,- El mecánico dominicano Carlos Díaz, quien en 2013, le quemó la cara a su ex mujer con un soplete e intentó hacer lo mismo con su antiguo jefe en un taller en el que trabajaba en el sector Inwood del Alto Manhattan, fue condenado a 35 años a cadena perpetua por el juez Gregory Carro de la Corte Suprema Estatal en Manhattan.

El abogado del mecánico, Erin Darcy, pidió clemencia al magistrado, alegando que Díaz, cometió el hecho debido a perturbaciones mentales, pero el juez, no se tragó el argumento y le impuso la drástica sentencia.

El fiscal adjunto Randolph Clarke Junior, pidió al magistrado, condenar al dominicano a 50 años a vida.

El fiscal calificó a Díaz de “sumamente egoísta y en vez de asumir la responsabilidad por su fracaso matrimonial, lo que hizo fue tomar venganza contra su ex mujer”.

El juez dijo que mientras Díaz será tratado por sus problemas mentales, el cárcel, lo sentenció a la larga pena, que incluye la deportación a la República Dominicana, “porque cometió el horrible ataque a sangre fría, que fue calculado y francamente insensible”.

«Al acusado no le importaba nada ni nadie más que él sí mismo,» añadió el fiscal adjunto.

Díaz fue encontrado culpable en el juicio en diciembre por los cargos de intento de asesinato, asalto, intento de asalto y tentativa de incendio.

El defensor del mecánico, argumentó que Díaz, nunca ha sido tratado de sus problemas psicológicos.

El magistrado Carro  dijo que mientras Díaz puede sufrir de problemas psiquiátricos, su conducta fue aterradora, deliberada e intencional.

«Yo también creo plenamente que entendía sus acciones que fueron ilícitas e intencionales», señaló el juez.

El abogado Darcy solicitó una condena de 20 años a por vida, diciendo que  habría sido una sentencia más apropiada.

Darcy dijo que  antes de su detención, Díaz parecía ser un hombre funcional y trabajador que mantenía a su familia y se preocupaba por sus dos hijos.

“Pero la realidad era una que tenía una imagen muy diferente, argumentó.

“Mirándolo de cerca, que se aprecia a un hombre muy enfermo mentalmente y de rápido deterioro, sin diagnóstico ni tratamiento, que venía sufriendo año tras año», agregó el abogado defensor.

Díaz, hablando a través de un intérprete en español, expresó remordimiento.

«Lamento lo que pasó. Mi corazón está roto, no soy tan  malo…”, le dijo al juez antes de ser sentenciado.

Su ex esposa, ofreció un emotivo testimonio en el juicio por el dolor que sufrió durante y después del incidente.

Relató que el mecánico después que quemarla en la cara con el soplete, intentó dejarla morir en un estacionamiento cuando y se fue a un taller de desabolladora, donde  trabajaba, donde trató de hacerle lo mismo a su ex jefe, Gerson Marchena, quien logró frustrar el ataque.

El hecho ocurrió en la Novena Avenida y la calle 207.

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