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Monseñor Morel Diplán lamenta que el consumismo opaque el sentido de la Navidad

Santo Domingo. — El arzobispo coadjutor de Santo Domingo, monseñor Carlos Tomás Morel Diplán, lamentó que la esencia espiritual de la Navidad, centrada en la celebración del nacimiento de Jesucristo, haya sido desplazada por el consumismo y las prácticas sociales alejadas de la fe.

“Celebramos la vida, la fraternidad, la comunión, que Dios se hace uno de nosotros. Pero lamentablemente el mercado ha aprovechado este tiempo y lo ha convertido en una gran fiesta de consumo”, expresó durante su participación en el programa Hoy Mismo.

El prelado advirtió sobre la pérdida de valores fundamentales como la convivencia familiar, la oración y el compartir, señalando que durante estas fechas se incrementan los accidentes de tránsito, la intoxicación por alcohol y los conflictos familiares.

Menor asistencia a los templos

Monseñor Morel Diplán calificó como paradójico que, siendo la Navidad el día más importante para los cristianos, las iglesias registren menor asistencia.

“Nos preparamos todo el Adviento para este día, pero el 24 la gente está más ocupada en la cena, la bebida y la fiesta. El menos feliz es el templo”, lamentó.

La Iglesia y su incidencia social

El arzobispo coadjutor afirmó que, pese a la percepción de una disminución de la influencia de la Iglesia, el catolicismo mantiene una presencia viva y activa en la República Dominicana. Atribuyó los cambios a la complejidad de la sociedad actual, el crecimiento poblacional y el impacto de las redes sociales.

“Antes la Iglesia era más pequeña y el mensaje se sentía en todo el país. Hoy se diluye más, pero nuestras parroquias siguen llenas”, sostuvo, citando como ejemplo el crecimiento de movimientos como Emaús, que recientemente reunió a unas 15 mil personas.

Iglesia, justicia social y migración

Morel Diplán aseguró que la Iglesia no puede permanecer en silencio ante las injusticias, especialmente cuando se vulnera la dignidad humana. En relación con la migración haitiana, reconoció la complejidad del tema y afirmó que la Iglesia respeta las leyes migratorias, pero exige un trato humano y digno.

“Si hay que deportar, que se haga conforme a la ley, pero sin maltratos. La salud es un derecho fundamental; una mujer embarazada o una persona enferma debe ser atendida, sea dominicana o extranjera”, enfatizó.

Diaconado, mujer e Iglesia global

El arzobispo destacó el crecimiento del diaconado permanente, con más de 600 diáconos en el país, y resaltó la amplia participación de la mujer en la vida pastoral. Asimismo, reconoció el declive del catolicismo en Europa y el crecimiento o estabilidad en África, Asia y América Latina.

Valoró positivamente el legado del papa Francisco y la continuidad que observa en el pontificado de León XIV, destacando una Iglesia abierta, misionera y dialogante.

Invitación a recuperar lo esencial

Monseñor Morel Diplán presidirá la misa de Nochebuena este 24 de diciembre a las 7:00 de la noche en la Catedral Primada de América, e invitó a los fieles a recuperar el sentido profundo de la Navidad.

“Que no se nos olvide lo esencial: celebrar la vida, la fe y el nacimiento de Cristo”, concluyó.

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