Papa Francisco se escapa de Vaticano para comprarse nuevos zapatos
Roma, (ANDINA),- El papa Francisco volvió a sorprender a los habitantes de Roma cuando salió del Vaticano no para un acto oficial o una visita apostólica, sino para dirigirse a un negocio de implementos ortopédicos y, como un cliente más, comprarse unos zapatos nuevos, según dieron cuenta las redes sociales.
El pontífice de 80 años visitó el martes por la tarde una farmacia especializada en artículos ortopédicos localizada cerca del Vaticano para recoger un par de zapatos ortopédicos que usa para compensar el dolor que le causa una neuralgia crónica en el nervio ciático.
La visita fue filmada por los celulares de un puñado de clientes que estaban en la tienda en ese momento y que luego colgaron las imágenes en las redes sociales.
En un video publicado por Facebook en la página de Martina Duarte, titulado «Un martes con el papa», una joven hace una selección de imágenes tanto en video como con fotos de Francisco mientras se encuentra en la tienda.
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En algunas se puede ver al papa bendiciendo un crucifijo de un joven empleado de la tienda y tomándose fotos con los clientes.
El pontífice argentino llegó a la tienda, ubicada a unos 500 metros de la plaza de San Pedro, a bordo de un automóvil utilitario acompañado por una persona, habló con el personal y se mostraba amable y sonriente.
La publicación generó numerosas reacciones y comentarios, entre ellos uno divertido en el diario La Repubblica, en el que le piden que asuma la alcaldía de Roma, en plena crisis por un escándalo de corrupción.
No es la primera vez que el papa argentino suscita sensación al dejar su modesto apartamento en la residencia Santa Marta dentro del Vaticano para hacer compras personales.
El 3 de septiembre de 2015, sin sus guardias de seguridad y acompañado solo por su chofer, el Papa Francisco sorprendió a decenas de romanos y turistas que lo vieron ingresar a una óptica de Via del Babuino en el centro de la capital italiana para renovar sus lentes y, por supuesto, pagarlos él mismo.
El pontífice argentino, que añora su vida simple en Buenos Aires, confesó en una entrevista que lo que más le hacía falta desde que era jefe de la Iglesia católica era «callejear», salir a comer una pizza como cualquier anónimo ciudadano.
Pero no a todo el mundo le ha generado simpatía la última salida de Francisco. La página web del diario italiano La Repubblica publicó un comentario escéptico, al mencionar «el habitual exhibicionismo narcisista» del papa.
