• 19 abril, 2024

Pared Pérez advierte RD no renunciará a sus derechos soberanos

Pared Pérez advierte RD no renunciará a sus derechos soberanos

Reinaldo Pared Pérez

La Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó al Estado dominicano por lo que consideran violación de varios derechos en las deportaciones de haitianos efectuadas entre los años 1999 y 2000.

SANTO DOMINGO.-Reinaldo Pared Pérez, senador de la República y secretario general del Partido de la liberación Dominicana(PLD) defendió el derecho soberano de Republica Dominicana para aplicar una política migratoria y ordenar, cuando el caso lo amerite, la deportación de los ilegales que se encuentren en su territorio.

En una primera reacción a la decisión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que condenó a República Dominicana por las alegadas “expulsiones sumarias” de ciudadanos haitianos y dominicanos, Pared Pérez la calificó de aberrante y totalmente prejuiciada

El legislador por el Distrito Nacional expresó que a todo extranjero ilegal que se encuentre, no solamente en la República Dominicana, sino también en cualquier otro país, las autoridades de esa nación, llámese como se llame, tienen derecho a tomar las medidas pertinentes.

“Que se cansen de seguir condenado a la República Dominicana, pero el país tiene todo el derecho de repatriar a todos aquellos que se encuentren de manera ilegal, ese es un derecho que le asiste a la nación dominicana y al que nunca se debe renunciar”, declaró Pared Pérez a los periodistas que le abordaron en el Congreso.

Observa que en la actual, como en anteriores decisiones de la Corte Interamericana, predomina cierto prejuicio contra República Dominicana “las decisiones de la CIDH están prejuiciadas, “y por lo regular atentan contra la soberanía de República Dominicana”. Comentó.

Argumentó el secretario general del PLD y jurista que las repatriaciones es un derecho al que nunca la nación dominicana puede renunciar.

La opinión pública en general ha calificado la decisión de la Corte como una injerencia y una violación al derecho de soberanía de República Dominicana como nación independiente

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