
Ben Innes, de 26 años, aparece sonriendo junto al pirata, que lleva un falso cinturón de explosivos. Innes, citado por The Sun, confesó después «no saber por qué había hecho eso».
El avión, un Airbus A-320, fue secuestrado a primera hora del martes tras despegar de la ciudad egipcia de Alejandría (norte) rumbo a El Cairo.
El piloto del avión explicó a la torre de control que un pasajero amenazaba con hacer estallar un cinturón de explosivos —que resultó ser falso—, y lo obligó a aterrizar en el aeropuerto chipriota de Lárnaca, a unos 500 kilómetros de las costas egipcias.
Tras seis horas de tensión en el aeropuerto, los pasajeros y tripulantes fueron progresivamente liberados.
El secuestro no tuvo nada que ver con el terrorismo, según las autoridades de Chipre, y sí con motivos personales del egipcio, considerado «psicológicamente inestable»
