Posible uso por primera vez de drones armados con inteligencia artificial abre debate
Expertos militares occidentales están evaluando si un dron autónomo operado por inteligencia artificial (IA, por sus siglas en inglés) mató a personas en Libia el año pasado, funcionando por primera vez sin un controlador humano que lo dirigiera de forma remota para hacerlo.
Un informe de un panel de expertos de las Naciones Unidas publicado la semana pasada que concluyó que un dron avanzado desplegado en Libia “perseguía y combatía remotamente” a soldados que luchaban por el general libio Khalifa Haftar ha provocado un frenético debate entre funcionarios de seguridad y analistas occidentales.
Los gobiernos de las Naciones Unidas han estado debatiendo durante meses si se debe acordar un pacto global sobre el uso de drones armados, autónomos y de otro tipo, y qué restricciones se les debe imponer. El informe de la ONU sobre Libia agrega urgencia al debate. Los avances de los drones tienen «muchas implicaciones a nivel regional y mundial», dice Ziya Meral, del Royal United Services Institute de Gran Bretaña, un grupo de expertos en defensa.
«Es hora de evaluar dónde están las cosas con los drones turcos y la tecnología de guerra avanzada y lo que esto significa para la región y lo que significa para la OTAN», dijo en un evento organizado por Royal United Services Institute en Londres.
Según el informe de la ONU, el avión autónomo letal Kargu-2 de fabricación turca lanzó los llamados ataques de enjambre, probablemente en nombre del Gobierno de Acuerdo Nacional de Libia, contra las milicias Haftar en marzo del año pasado, marcando la primera vez que drones equipados con IA lograra un ataque exitoso. Los restos de un Kargu-2 se recuperaron más tarde.
Muchas organizaciones de derechos humanos se oponen al uso de drones autónomos que no requieren de operadores humanos para guiarlos de forma remota una vez que han sido programados. Hubo rumores de que el año pasado las fuerzas azerbaiyanas utilizaron aviones no tripulados de inteligencia artificial suministrados por Turquía, junto con los guiados por control remoto, en sus enfrentamientos con Armenia en la región en disputa de Nagorno-Karabaj y sus territorios circundantes.
Gran cantidad de dilemas
Si los drones de IA lanzaran ataques de enjambres letales, marcarían un «nuevo capítulo en armas autónomas», preocupa el Bulletin of the Atomic Scientists. Los críticos de los drones de IA, que pueden usar tecnología de reconocimiento facial, dicen que plantean una serie de dilemas morales, éticos y legales.
“Estos tipos de armas operan en algoritmos basados en software ‘enseñados’ a través de grandes conjuntos de datos de entrenamiento para, por ejemplo, clasificar varios objetos. Los programas de visión por computadora pueden capacitarse para identificar autobuses escolares, tractores y tanques. Pero los conjuntos de datos con los que entrenan pueden no ser lo suficientemente complejos o sólidos, y una inteligencia artificial (IA) puede «aprender» la lección equivocada», advierte Bulletin, una organización sin fines de lucro.
El fabricante del Kargu-2, Defense Technologies and Trade (STM), dijo a los medios turcos el año pasado que sus drones están equipados con tecnología de reconocimiento facial, lo que permite identificar y neutralizar objetivos individuales sin tener que desplegar fuerzas terrestres. Y los ejecutivos de la compañía dicen que los drones Kargu-2 pueden formar un enjambre de defensas abrumadoras.
El mes pasado, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, elogió el éxito de los vehículos aéreos no tripulados (UAV) turcos y dijo que los resultados que habían producido «requieren que se reescriban las estrategias de guerra». Turquía los ha desplegado en operaciones militares en el norte de Siria, han reconocido funcionarios turcos.
Hablando en una reunión parlamentaria de su gobernante Partido Justicia y Desarrollo (AKP) en Ankara, Erdogan dijo que Turquía planea ir más allá y apunta a estar entre los primeros países en desarrollar un avión de combate administrado por IA. Recientemente, el director de tecnología de Baykar, un importante fabricante turco de drones, anunció que la compañía había programado el 2023 para el vuelo inaugural de su prototipo de avión de combate no tripulado.