Recomiendan terapias basadas en evidencias
Un especialista mexicano co-autor de la guía mexicana de manejo de orteoartritis, recomendó que el uso de terapias basadas en evidencias.
En una información publicada en www.resumendesalud.com, el doctor Enrique Villalobos Córdova echó por tierra las soluciones mágicas que abundan en el mercado y que, según dijo, sólo sirven para empeorar la salud de los pacientes.
En el pasado congreso de los ortopedas dominicanos, el ortopeda expuso sobre las guías de manejo de osteoartritis, enfermedad que no tiene cura, pero que se puede llevar buena calidad de vida si se trata adecuadamente.
En su conferencia presentó la visco suplementación, una terapia que ofrece buenos resultados en la mejora del dolor y la función en pacientes con desgaste moderado – osteoartritis de grado 2 y 3.
El ortopedista mexicano, especialista en cirugía articular y medicina del deporte, ofreció su conferencia en el pasado congreso de la Sociedad Dominicana de Ortopedia, realizado en Bávaro, traído por Sanofi.
Les dejamos la entrevista realizada por Resumen de Salud:
“Tratamos en nuestra conferencia el manejo multimodal de los pacientes con desgaste de las articulaciones, principalmente desgastes de rodillas y osteoartritis; y cómo es importante hoy en día, dado que este problema no tiene una cura definitiva, el ofrecer una manojo de herramientas que tengan medicina basadas en evidencias detrás de ellas, a los pacientes, para mejorar su calidad de vida.
Y eso lo podemos englobar en cambios en el estilo de vida, como es el control de peso, ejercicios de bajo impacto, fortalecimiento muscular de las articulaciones, el uso de analgésicos cuando son necesarios, suplementos y, en lo particular, en lo que vamos abundar más es en la técnica de visco suplementación, que consiste en hacer un recambio de un líquido sinovial que ya está normalmente dañado, con menos cualidades que las originales, cuando no hay desgaste.
Ese líquido que tenemos en la rodilla normalmente ya desgastado, hay la oportunidad de que con nuevos fármacos se haga un recambio del mismo y aportar un líquido que esté rico en su peso molecular y nutrientes para nuestra articulación. Y esto ya está demostrado -por estudios de más de 15 años- que va a dar un efecto benéfico en cuanto a la mejora de dolor y función en los pacientes, de un periodo de hasta a veces hasta un año y en ocasiones más.
Es una estrategia que creo que los médicos ortopedistas aquí en la región debemos conocer y poder ofrecer en los casos precisos como parte de este manejo multimodal en los pacientes con osteoartritis.
¿Por qué la importancia de la evidencia?
Lo que sucede es que al ser un problema que no tiene solución todavía, la osteoartritis, esto ha dado lugar, al menos en mi país, en México, a mucha charlatanería; se ofrecen medicamentos mágicos, inyecciones milagrosas, que no sabemos ni siquiera dónde se producen, qué son, qué tienen; muchas veces no la aplica ni siquiera un profesional de la salud.
Sin embargo, uno revisa en el internet, en los periódicos, en los avisos oportunos: se cura la osteoartritis en una tarde viniendo con nosotros y con una inyección que tiene un costo mucha veces elevado. Además, es muy inseguro, porque ni el paciente sabe qué fue lo que le aplicaron. En ese sentido, yo considero que debemos de ser muy cuidadosos, los profesionales, los médicos y los especialistas en esta área, para poder educar a nuestros pacientes y poder alertarlos a utilizar estrategias que venga de una medicina científica, que tenga un respaldo.
Esto es un problema mundial. No estamos descubriendo el hilo negro, todo el mundo está buscando cómo tratarlo y hay estrategias que tienen el respaldo de experiencias en año, en varios países, y creo que esas son las que debemos ofrecer a los pacientes.
¿La evidencia supone que tiene estudios previos, debidamente comprobados?
Claro que sí; es decir, que ya se aplicó en fases experimentales, en cientos de pacientes que se midieron ciertas variables para ver si da un efecto benéfico o no.
Se midieron variables de seguridad para ver si no causaba daño en pacientes que fueron previamente protocolizados, que aceptaron estar en un protocolo de investigación bajo consentimiento informado y que después de pasar toda esa historia de investigación, son productos que ya tienen ese aval científico, disponibilidad comercial para podérselo ofrecer a cualquier paciente con ese respaldo científico. Esas son estrategias que en particular son de las que yo vengo hablar, las que hay que apoyar y unas de ellas es la visco suplementación.
Resultados positivos de esos estudios, acorde con esa solución:
Hablando en particular sobre la visco suplementación, con un medicamento de alto peso molecular como el Ilano GF20, se ha observado una mejora en dolor y función en caso de pacientes sobre todo con buena respuestas; pacientes que tienen un grado de desgaste moderado, que medicamente hablando es un grado de osteoartritis de grado 2 y 3, y cerca de un 70 por ciento da buena respuesta y esperamos que van a mejorar su síntoma de dolor y función por un período de 6 meses a un año, teniendo en el tiempo de mejor efecto al tiempo de los 6 meses.
Un autor de una guía:
La guía se elaboró en México sobre medicina basada en evidencia, específicamente en una reunión multi-disciplinaria con médicos de diferentes especialidades como reumatología, ortopedia, medicina interna, del deporte, de rehabilitación.
Fuimos revisando una por una las estrategias que hoy en día existen a nivel mundial para manejo multimodal de la osteoartritis y buscamos el respaldo científico que podría dar cada una de las estrategias y el fruto de ese respaldo científico es esta guía, que ya puede aportar estrategias que hoy en día -al menos desde este consenso hecho en México- tienen evidencia para el manejo de osteoartritis, donde está el control de peso, el ejercicio de bajo impacto, el fortalecimiento, visco suplementación.
¿Cuál es la diferencia fundamental de esta guía mexicana si se compara con las guías americanas y las europeas?
Esta guía mexicana fue realizada el año pasado y a nivel internacional. La Academia Americana de Ortopedia, que para nosotros tiene mucha influencia en nuestro país, elaboró una guía de práctica clínica publicada en 2010, donde se realizó –igual- una reunión de expertos y una metodología establecida que coincide mucho con la guía mexicana.
Sin embargo, lo que nos sorprendió es que recientemente el año pasado ellos hicieron una nueva modificación a su guía: cambiaron grupos de expertos, los criterios metodológicos y de sus 15 recomendaciones que tres años previos habían dado a conocer al mundo, modificaron el sentido de ésas como en 7. Entonces para nosotros es un poco decepcionante el que viniendo de una Asociación tan seria la americana, nos cambien una guía de práctica clínica que necesita años de estudios, cientos de trabajo para poder decidir a favor de una cosa o no, y que en menos de 3 años le hayan cambiado el sentido de varias recomendaciones.
Lo que yo sugiero para la comunidad latina es basarse o tener acceso al documento que hicimos en México.
No creemos que vayamos a cambiar las recomendaciones que hicimos a conciencia un grupo de expertos multidisciplinarios a corto plazo, a menos que surja nueva evidencia de la cual se está en espera”.
Perfil académico:
Médico ortopedista formado en Ciudad de México en el Instituto Nacional de Rehabilitación. Post grado posterior a la especialidad en cirugía articular y otro de artroscopia y lesiones deportivas.
Graduado de la Maestría en Ciencias Médicas de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Médico adscrito del Servicio de Ortopedia del Deporte y Artroscopia, del Instituto Nacional de Rehabilitación, México.