Sube a 56 cifra de muertos por nuevo virus en China
BEIJING, (VOA),-El nuevo virus aceleró su propagación en China el domingo con 56 muertos hasta ahora en lo que el presidente chino catalogó como una situación grave, y el gobierno redobló sus esfuerzos para restringir los viajes y las concurrencias al tiempo que enviaba a toda prisa a personal médico y suministros a la ciudad aislada en el centro del brote.
La cifra reportada el domingo por la mañana cubre las 24 horas previas y marca un incremento de 15 muertes y 688 casos para totalizar 1.975 personas infectadas.
El gobierno también reportó cinco casos en Hong Kong, dos en Macao y tres en Taiwán. Unos pocos casos han sido detectados en Tailandia, Japón, Corea del Sur, Estados Unidos, Vietnam, Singapur, Malasia, Nepal, Francia y Australia.
Canadá informó el sábado de su primer caso, un hombre de cincuenta y tantos años que viajó recientemente en avión de Wuhan a Guangzhou, China, y después a Toronto.
En declaraciones publicadas por la emisora estatal CCTV, el presidente chino Xi Jinping dijo el sábado que la propagación del nuevo virus es una situación grave y subrayó las medidas urgentes adoptadas por el gobierno para contener la enfermedad. El presidente subrayó las acciones urgentes y más amplias emprendidas por el gobierno para controlar el brote durante una reunión con dirigentes del Partido Comunista, al inicio de la festividad del Año Nuevo Lunar, la más importante del país pero acotada por la enfermedad, según CCTV.
Las autoridades han ordenado a las agencias de viaje que detengan todos los recorridos turísticos en grupo, informó la Asociación China de Servicios de Viaje citada por el periódico China Daily, que se edita en inglés. Los turistas chinos viajan por el país y al exterior durante el Año Nuevo.
Los millones de personas que viajan con motivo de la festividad han contribuido a la propagación del brote en el interior del país y el exterior después de la aparición de los primeros casos en la ciudad de Wuhan, en el centro de China. La gran mayoría de infecciones y muertes han ocurrido en territorio continental de China, pero ya se han detectado más casos en otros países.
Singapur reportó su cuarto caso el domingo, un hombre de 36 años originario de Wuhan. El Ministerio de Salud indicó que el hombre no había presentado síntomas durante su vuelo, pero que al día siguiente tenía mucha tos y al buscar atención médica el 24 de enero fue puesto en cuarentena de inmediato.
Corea del Sur confirmó su tercer caso, según la agencia de noticias Yonhap.
Australia y Malasia informaron el sábado de sus primeros casos, cuatro cada uno, y Japón, su tercero.
Francia confirmó el viertes tres casos, los primeros en Europa, y Estados Unidos identificó su segundo, una mujer en Chicago que había regresado de China.
La ciudad asignará 6.000 taxis a diferentes vecindarios, que están gestionados por comités de residentes, para ayudar a transportarse a quienes necesiten hacerlo, según el China Daily.
En Hong Kong, la gobernante Carrie Lam dijo que su gobierno elevará la reacción local a emergencia, el nivel más alto, y cerrará las escuelas durante dos semanas más después de las festividades del Año Nuevo Lunar de la próxima semana. Los centros educativos reabrirán el 17 de febrero.
Lam dijo que no habrá vuelos directos ni trenes con salida de Wuhan.
En un indicio del aumento de la carga de trabajo en el sistema de salud de Wuhan, la Agencia de Noticias Xinhua (oficial) informó que la ciudad tiene previsto construir un segundo hospital provisional con unas 1.000 camas. La ciudad dijo que se prevé la conclusión de otro hospital para el 3 de febrero.
Expertos: mercados de animales vivos en el mundo pueden generar enfermedades
El nuevo virus procede de una amplia familia de lo que se conoce como coronavirus, algunos de los cuales causan a lo más un resfriado. El de Wuhan provoca síntomas parecidos a los de un resfriado o una gripe, con tos y fiebre y, en los casos más graves, dificultades para respirar. Puede agravarse y derivar en una neumonía, que podría ser mortal.
China suspendió el transporte por avión, tren y otros medios que tenga que ver con Wuhan, e impuso medidas similares de aislamiento en 16 ciudades próximas que, en total, suman 50 millones de habitantes, más que Nueva York, Londres, París y Moscú juntas.
La principal festividad de China, el Año Nuevo Lunar, comenzó a la sombra del virus. Las autoridades cancelaron diversos actos y cerraron el acceso a lugares de interés turístico y salas de cine.
Los templos fueron cerrados, al igual que la Ciudad Prohibida de Beijing y Disneyland de Shanghai, y las personas cancelaron reservaciones que habían hecho en restaurantes con motivo de la festividad, que la gente dedica tradicionalmente a reuniones familiares, paseos y otras celebraciones en el país, de 1.400 millones de habitantes.
Las personas en China utilizaban máscaras médicas en lugares públicos como tiendas de comestibles, donde los empleados distribuían a los clientes desinfectante para las manos. En algunas partes del país fueron instalados puestos de control para revisar la temperatura de las personas y era obligatorio el uso de máscaras médicas.