Tradición sabática judía originó fuego en el que murieron 7 niños en Brooklyn
Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK,- La tradición sabática de los judíos ortodoxos, prohíbe a sus sectarios usar cualquier tipo de artefacto eléctrico, aún para cocer los alimentos.
Por ello, el padre de los siete niños muertos en el incendio en su casa de Brooklyn el sábado, Gabriel Sasson, se acogió a las reglas y dejó comida calentando en un plato que se prendió y extendió las llamas por toda la vivienda.
Las víctimas, en edades de 5 a 15 años, perecieron quemadas después de la medianoche del sábado, cuando las llamas y el humo arroparon la cocina y la segunda plata de la casa en el sector Milwood de Brooklyn.
“¡Mami, mami, ayúdame!”, eran parte de los gritos que se escuchaban de las bocas de los desesperados niños que veían la muerte próxima.
Los muertos son Yakob de 5 años, Sarah (6), Moshe (8), Yeshua (10), Rivka (11), David (12) y Eliane de 16. Miles de personas asistieron a los funerales en Brooklyn para despedir los restos de los menores, sepultados en Israel, el país de sus ancestros.
Uno fue declarado muerto en la escena y otros dos murieron en el hospital Beth Israel. El adolescente mayor fue internado en el hospital Maimónides y otros tres hermanos, fueron en el Centro Médico Comunitario Nueva York en Brooklyn. Todos están en estado crítico por inhalación de humo.
La madre y la hija sobrevivientes, siguen graves en los hospitales Jacobi de El Bronx y en el Centro Médico Universitario North de Staten Island.
La tragedia ha sacudido a toda la ciudad y el alcalde Bill de Blasio, se apersonó a los escombros que quedaron de la vivienda.
La madre de los menores muertos, Gayle Sasson de 45 años de edad y su hija Tzipara de 14, lograron saltar por una de las ventanas, para escapar de las llamas.
La mamá gritaba que sus hijos estaban adentro y con las manos y los pies ensangrentados, clamaba por ayuda para que los salvaran.
Los menores murieron mientras estaban en cinco habitaciones en la parte trasera de la vivienda, construida de ladrillos y de dos pisos.
El comisionado de bomberos de Nueva York, Daniel Nigro, calificó la tragedia como la peor de los últimos años en la ciudad. El funcionario explicó que era imposible el que la madre pudiera volver a entrar a la casa, porque el fuego subió por las escaleras, impidiendo el acceso a las habitaciones traseras.
El padre de los niños estaba participando en una conferencia en el momento del fuego.
Las llamas y el humo eran tan fuertes, que ni siquiera se podía ver la casa, dijeron vecinos de la familia.
El esposo, dejó la comida calentándose en el plato, lo que hizo según la tradición judío ortodoxa antes de la puesta del sol el viernes.
La religión les prohíbe usar hornos o aparatos eléctricos. La familia fue descrita como muy religiosa y ultra ortodoxa por allegados
Después de recorrer el interior de la casa, el alcalde de Blasio, dijo que la tragedia es increíble. “Es inimaginable lo que se puede ver ahora, era una casa para una familia grande y fuerte que fue aniquilada por las llamas”.
El jefe de los bomberos, relató que el fuego, se iguala a otro que arrasó con una familia de nueve miembros en El Bronx y en cuya casa no había detectores de humo.
Las primeras unidades de bomberos llegaron en tres minutos, después de la primera llamada al 911, pero encontraron la puerta principal abrazada por las llamas.
En la casa de los judíos, había un solo detector de humo y estaba en el sótano.
