Univisión deberá pagar un millón de dólares por aceptar “payola”

La Comisión Federal de Comunicaciones en Estados Unidos, consideró que la empresa habría aceptado soborno para colocar música de artistas latinos en sus programaciones radiales, según autoridades del departamento de justicia

Por Rose Mary Santana

Miami, Florida.—La Comisión Federal de Comunicaciones, conocidas como FCC por sus siglas en inglés, conjuntamente con el Departamento de Justicia en Washington, DC, condenaron al pago de un millón de dólares a la amplia cadena televisiva y radial de Univisión, bajo la acusación de haber aceptado el pago de la denominada “payola”.

Según las autoridades, empleados de algunas de las emisoras de Univisión, recibieron pagos de dinero en efectivo a fin de colocar música de algunos artistas hispanos en sus programaciones radiales, las cuales están dirigidas mayormente a los latinos que residen en Estados Unidos. Igualmente Univisión Music, un sello disquero de la empresa habría cometido la infracción.

Conforme a ambas agencias federales, las violaciones de la cadena Univisión ocurrieron entre los años 2002 y 2006, donde directores de programación de estaciones propiedad de la cadena radial, recibieron algunos pagos para reproducir y colocar canciones  de algunos artistas hispanos, lo que es ilegal en Estados Unidos, violentando además las normas de la Comisión Federal de Comunicaciones.

Las agencias añaden además que “se aceptaron también pagos secretos, para difundir con mas frecuencia a artistas de una ex disquera de la cadena radial”. Indican que los directores de programas en estaciones radiales en San Antonio y El Paso, Texas, así como también las situadas en Los Angeles y Sacramento, California, presentaban facturas falsas a Univision Music por servicios que nunca fueron prestados.

De esta manera Univision Music pagaba dichas facturas y los directores de programas se embolsaban los pagos, ascendentes a un monto entre US$1.000 y US$10.000 conforme a las agencias federales.

Univisión

La empresa aún no se ha referido públicamente a los cargos imputados. A principios del año 2008, Univisión vendió su sello discográfico a Universal Music Groupy y este sello discográfico había sido parte de Univision Services Inc.

Un escueto comunicado de la empresa indica que “el alegato de utilización de la  payola involucró a un grupo aislado de empleados» que actuaron sin conocimiento de nadie fuera del sello discográfico. La compañía no emitió comentarios en torno a la participación de Univision Radio.

El Departamento de Justicia y la Fiscalía Federal, establecieron un acuerdo con Univisión Services Incorporado, donde se establece que la empresa se declara culpable de un cargo de asociación ilícita para cometer fraude postal y acordó pagar una multa de 500.000 dólares.

Igualmente, Univision Radio también acordó pagar US$500.000 bajo un arreglo paralelo con la FCC. El acuerdo además limita el valor de los boletos para conciertos y otros regalos que las estaciones radiales y empleados de Univisión pueden aceptar de sellos discográficos.

Globalización de la “payola”

La “payola radial” es una práctica muy generalizada en los países de América Latina, entre ellos muchos la República Dominicana, Puerto Rico y otros del caribe, pero en el sector musical de Estados Unidos, la misma constituye una práctica ilegal pausible de condena por la justicia en este país.

La “payola” actúa en desmedro de artistas y productores que se esfuerzan por captar la acogida de un público, perjudicando así el trabajo de miles de técnicos, programadores, productores, artistas y hasta familiares del artista.

Según algunos sicólogos, “en algunos casos, estos artistas, reconocidos por su excelente calidad vocal, se ven opacados por producciones discográficas que no reúnen la más mínima calidad, lo que en la mayoría de los casos, provocan angustia, depresión y hasta alejamiento del medio a esos profesionales musicales”, expresó un facultativo en la materia a este medio.

Esta odiosa práctica ilegal consiste en “incentivar” a través de grandes sumas de dinero, la colocación de piezas musicales a determinados disc jockey, lo que finalmente puede garantizar una difusión inmediata del tema musical del artista.