Por Ramón Mercedes
El último de los agentes fallecido trágicamente es Brian Mulkeen, de 33 años, cuando intentó detener a un hombre, de 27 años, y mientras luchaba cuerpo a cuerpo el delincuente trataba de desarmarlo y el otro agente le disparó tres veces, pero alcanzando al uniformado, quien falleció más tarde.
Fue sepultado este fin de semana en Yonkers. El hombre fue ultimado de varios disparos por otros agentes policiales.
Mulkeen es el segundo caso de un policía que muere durante sus labores en lo que va del año. El detective Brian Simonsen murió baleado accidentalmente por otros oficiales en febrero mientras se enfrentaba a un sospechoso de robo en Queens.
Los agentes neoyorkinos que se han suicidado este 2019 son los hispanos Robert Echeverría, de 56 años; Johnny Ríos, de 35; Steven Silks, de 62; Joseph Calabrese, de 58; Michael Caddy, de 29; Kevin Preiss, de 53 y Terrance McAvoy, de 30.
Desde 2014, un promedio de cinco oficiales han muerto cada año por suicidio en NYPD, cuya cantidad de oficiales asciende aproximadamente a los 40 mil en los 76 precintos de la ciudad, incluyendo más de 2,500 de origen dominicano, asimismo aproximadamente 15 mil empleados civiles.
En el 2017, 140 hombres y mujeres de la policía y 103 bomberos se quitaron la vida en EE.UU, con una tasa per cápita más alta que la población civil, se informó.
