En una declaración escrita, Veras y Polanco aseguraron que Domínguez Trujillo hizo tal declaración “en interés de mantener vigencia y sembrar confusión en lo mejor y más sensible del pueblo dominicano”.
Agregaron que el descendiente del exdictador dominicano “pretende, sembrando odio y lanzando veneno, que nuestro pueblo olvide el horrendo asesinato dispuesto por su abuelo contra las tres heroínas que simbolizan la lucha del pueblo dominicano contra el régimen odioso, cruel y despótico de Rafael Leonidas Trujillo”.
“Ante la blasfemia lanzada por el trujillismo, deben levantar su voz los más consecuentes luchadores por la libertad, los derechos humanos y la democracia real, reclamando respeto a la memoria de las heroínas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, así como a todos los héroes y mártires de la heroica acción del 30 de mayo de 1960”, agregaron Veras y Polanco.
Negro Veras y Ulises Polanco consideraron que con el criterio enarbolado por Domínguez Trujillo “se le falta el respeto a la memoria de las Hermanas Mirabal, lo cual es inaceptable, ya que todos sabemos que fue Trujillo quien ordenó su asesinato”.